Visitas virtuales en el sector inmobiliario

Está a la orden del día utilizar la realidad virtual para algo más que para el entretenimiento.

Puede resultar una herramienta muy potente para el sector inmobiliario y, desde el inicio de la pandemia del Covid-19, es casi imprescindible ya que te permite moverte por distintos espacios sin moverte del sofá.

En el sector inmobiliario se han desarrollado diferentes formas de buscar piso sin salir de casa, si bien no todas consisten en una realidad virtual, existen diferentes tipos de visitas virtuales que pueden hacer tu búsqueda mucho más fácil:

1. Vídeo Inmobiliario: es una grabación, de toda la vida, con nuestra cámara o móvil, en el que nos movemos por las estancias del inmueble, enseñando una a una las habitaciones y añadiendo el factor auditivo en el que podemos hablar y dar detalles. Es importante que sea de buena calidad, que tenga un buen encuadre para proporcionar una visita lo más real posible. En este caso, la persona interesada en la compra o alquiler del piso no tendrá la oportunidad de moverse libremente, estará limitado a los movimientos que haga la persona encargada de grabar el vídeo.
2. Tour Virtual Inmobiliario: consiste en realizar fotografías 360 que nos permite visualizar el entorno alrededor del punto donde se tomó la fotografía. Es más recomendable que el vídeo porque el visitante puede saltar de habitación en habitación visualizando todo el entorno cómo quiera, aunque es fácil que no visualicemos bien las dimensiones de las estancias.
3. Visita 3D: sin duda es la que mejor funciona. Se genera un modelo en 3D con imágenes de alta calidad y una medición laser, que reproduce el espacio real casi al 100%. La visita se hace más amena y el cliente puede hacerse una idea más acertada del espacio en el que está interesado ya que se aprecian muchos más detalles que con el tour virtual o el vídeo inmobiliario.

Realizar una visita virtual en el ámbito inmobiliario presenta muchas ventajas.

Ahorraremos tiempo y desplazamientos al enseñar o buscar un inmueble, sobre todo en esta situación que estamos viviendo, que es posible que nos genere un rechazo a la hora de salir y evitar aglomeraciones o excesivo contacto en las visitas.

Nos permite realizar visitas desde cualquier parte del mundo con solo un clic y, además, es un factor que hace que aumente la fiabilidad en el cliente, ya que denota un cuidado y una profesionalidad en el propietario o la empresa encargada de realizar las visitas virtuales.

Pero una de las desventajas que presenta una visita virtual es que lleva mucho tiempo y dedicación en la creación de cualquiera de los tipos de visita y, por mucho que genere en el cliente más interés y crea estar convencido de lo que ve, habrá que programar una futura visita física en la que influye considerablemente el factor emocional en el que verá de forma más clara su destino como futuro inquilino o propietario.